10.9.08

La muerte del hombre

[Ganador del 3º premio en el concurso El Más Peor cuento del mundo]


De las muchas variedades y tipos de detectives, él pertenecía a los que se hacían llamar “escolares de Sherlock”. Corría el año 2242, y en el II Distrito Lunar pocos habitantes conocían al ser que inspiraba y determinaba, en parte, la doctrina de esta escuela. Más de 300 años después, el alguna vez célebre Sherlock Holmes se había convertido en un detalle nimio en la memoria de cualquier historiador que se jactase de conocer la historia previa a la Gran Bomba Americana que terminó con el ecosistema terrestre definitivamente. Por fin, el gobierno yanqui, y todos sus amigos (el gobierno argentino, el árabe, el hindú); más todo el grupo de físicos cuánticos más forros de la historia, dinamitaron el núcleo volcánico del planeta y le cagaron la vida a todo el mundo para el resto de la cosecha. Sólo ellos, y un par de colados más, tuvieron acceso a un cohete (el inolvidable “Sorete Espacial”) que los expulsara de ese infierno y los trasladara hacia las puertas del nuevo cielo: la Luna.

Allí, los 1092 seres humanos que llegaron en el Sorete expropiaron la base lunar soviética “el martillo y la hoz” y, luego de sodomizar a los cosmonautas , establecieron la nueva colonia humana (el II Distrito Lunar de los que saben). “¿Y qué carajo me importa?”, podrán decir. Bueno, nada puedo hacer para resolver sus conflictos motivacionales; pero si me tienen un poquito de paciencia, verán que no fue tan malo seguir el hilo de este relato. Sigamos.

Ben Affleck, el sujeto en discordia, nuestro “héroe” o personaje principal, como les decía al comienzo de este hermoso relato, que espero tengan a bien terminar de recorrer; porque, no quiero ser pesado, pero creo que puede nutrir su experiencia existencial; como les decía, nuestro amigo Ben no era más que uno de los 1092 humanos que llegaron en el Sorete. Por supuesto que la vida en la Luna no era sencilla, ni cómoda; y cualquier ser mínimamente inteligente, en esta situación, se hubiera ocupado de organizar la vida en el nuevo hábitat, y ver la forma en que podría prolongarse. Por supuesto, no es lo que hizo este grupo de humanos, que habiendo sodomizado y luego asesinado con biromes “BIC” a los únicos capaces de gerenciar la base lunar, solo atinaron a consumir instintivamente todo lo que la capacidad instalada les permitía; atragantándose de leche de soja y orinando metabolitos de cerveza en los cultivos, que pronto se secaron. Todo este frenesí glotón fue productos de impresionantes orgías y borracheras, que a lo largo de un año se habían vuelto demasiado aburridas para los 1092.

Es así que ahora el relato se concentra en el casi-presente con la mayoría de estos imbéciles garchadores cansados de garchar, y ahora agrupados en escuelas de detectives con la intensión de averiguar de dónde habían venido (lo habían olvidado) y para qué carajo. Por supuesto, a nadie le quedaba la más mínima duda que este era el fin de la especie humana en el universo tal cual lo conocemos. Tampoco había duda de que era imposible imaginar un final peor para esta especie, ni uno más pelotudo. En fin, tragi-comedia entretenida para Dios, dirán algunos, si es así ¡Que lo disfrute!

De esta manera, “los 1092”, como esperan ser conocidos esta manga de imbéciles, se dedicaron a investigar, a ser verdaderos detectives. Así, “Ludópatas del Quini” intentaron conocer cómo se organizaba el Quini 6 en la década Menemista; “Los seguidores de Martín” se esforzaron en conocer la cantidad exacta de goles del extinto goleador; y los “escolares de Sherlock”, un poco más serios en sus intensiones, o al menos mas concientes de su ridícula situación existencial, quisieron comprender por qué carajo el planeta había estallado en mil pedazos y ellos estaban destinados a ser la última página de la historia humana. Ben, uno de los físicos cuánticos forros; lejos de cualquier autocrítica adulta, planteó que tal catástrofe fue producto del ominoso trabajo del “gen Tasmania”. Dicho gen, según explicó (y todos le creyeron), forma parte de cada una de las células de cada una de las personas, y, cuando existía, allá por 1940, también formaba parte de cada una de las células de cada uno de los demonios de Tasmania, en su momento frecuente habitante de esas islas.

Según afirmaba Ben, este gen estaría indignado con la extinción del tigre de Tasmania en manos del hombre; se habría calentado y puesto en campaña para destruir la especie humana. O sea, que el trabajo arduo de ese gen a lo largo de 350 años y en cada una de las personas habría provocado la destrucción del hombre.

Recontra calientes con el gen de mierda, los 1092 decidieron exterminar a este diminuto y perverso ser que parasitaba sus cuerpos; y polvo previo, concretaron el último suicidio humano colectivo (y el fin de la humanidad) felices de haber aniquilado al gen y desenmascarado su perverso plan. ¡Eran verdaderos detectives!



Firma:

El Pelado Pululante de Púlula


6 comentarios:

El Jurado Inapelable dijo...

Borges + Peter Capusotto + Sus Videos – Borges + Aira – Los Videos de Peter – Capusotto – Aira + Crítica Social = El Pelado Pululante de Púlula y la muerte del hombre. Copi envidiaría poder escribir un cuento así, de no estar muerto. La imaginación vuela y el manejo del estilo lagrimea ensueños visionarios en esta eléctrica narración, caótica y acelerada, aunque terriblemente lógica y atenta a cada detalle, que dibuja saltos aleatorios de tiempos intra y extranarrativos en mundos y de interlocutores intra y extradiegéticos cuya lectura se prolonga inevitablemente ante las irreprimibles carcajadas y lamentos por el tema y los subtemas de todo el cuento en que la carnalidad diluye la dialéctica con una mecánica caníbal. En su crítica social y su poética de la ignorancia, une los opuestos eros y tánatos en un lunático ambiente de crítica social, obteniendo como lógico resultado, sí, claro que sí, uno de los Más Peores cuentos del mundo.

Garufita dijo...

Ya por el título yo creo que esto debería tener el 1º puesto...

Pero sé que el jurado es Inapelable...

Ya estoy soñando con lo que vendrá...

el monito dijo...

otro pelado de novela! cuantas risas me hizo disparar con sus pululancias; y a partir de ahora el jurado es apelable, y apelo, y basta de pelar porq pelo yo, y le calza mejor la 1 y le van a retornar su corona. Creo q lo merece(aunque no conozco a los demas ascosanonimos). Chau

laet.. dijo...

el hermoso relato del pululense merece mi mas profundo respeto.
Partiendo de un contexto ciencia ficcion-apocalptico, la historia asciende a los cielos para hundirse en el bestialismo, al mejor estilo "jardin de las delicias". Güenisimo. Q ben affleck, sea el protagonista, impagable. Pero son las escuelas de detectives (su diversidad recuerda a la clasificacion de animales de cierta enciclopedia china) y su capacidad para aplicar la fria logica para resolver la cuestion lo q mas garpa de este cuento.. o será el narrador(otro elemento groso)? nose.
finalmente, nos encontramos con la critica histórica, y el fatalismo tanático-tal como mencionaron los sabios del JI- con eso del gen de tasmania. Porq en esa isla q queda no tan lejos de australia, cuando los huincas, como ben afflecck, decidieron q habia q "limpiarla" salieron en cacería humana, y avanzando como una gran columna, liquidaron a cuanto nativo encontraron, todos,todos, ni uno se les escapó. Obviamente el autor conciente de estos hechos, nos los trae a la conciencia a través de su metáfora con color de teoria lamarkiana,y al mismo tiempo pone en evidencia cuan forros pueden ser los positivistas.

bravo pelado, ud rockea!

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

Para mi Kaplö y otros tiene bien ganado su puesto. Un cuento que es mas absurdo que el propio absurdo no tiene limites para absurdear y generar lo que genera. El otro cuento el del segundo puesto me parece demasiado como para ser el mas peor cuento de los peores.

Aguante Kaplö y los otros que son muchos eh.